¡Bienvenidos!

Este mes se nota que muchos ya estamos de vacaciones, y hay poquito que mencionar.

Lo más importante o preocupante es, a modo de resumen, la subida de los impuestos a partir del 1 de septiembre, aquí os dejamos una breve reseña de lo que hasta ahora está más o menos claro.

Pero pasada la mala noticia, desde México nos dejan este artículo sobre lo que  hacen los editores, los correctores y la posición del autor frente a los cambios.

También hemos encontrado este artículo sobre cosas que puede hacer un traductor en verano. Sí, va dirigido a estudiantes y de traducción, pero ¿acaso no nos exige nuestra profesión ser estudiantes toda la vida? Además, muchas de las ideas se adaptan a nuestras necesidades.

Para terminar os dejamos dos cosas: una entrada de nuestra compañera Carmen Hurtado sobre nuestra «obsesión» con la lengua y su corrección y cómo la transmitimos (o queremos transmitirla) a quienes nos rodean, sobre todo a nuestros hijos, y nuestra preocupación por la literatura infantil.

Finalmente, como nuestro inicio fue bastante desolador, os dejamos el enlace a este vídeo de un corto que se presentó en el certamen «Traductores ribereños por el Mundo» y en el que quedó finalista. La protagonista es una joven traductora autónoma, pero bien podría ser cualquier corrector autónomo. ¿Os sentís identificados? ¿Fue así vuestro comienzo como correctores? ¿Cómo conseguisteis normalizar vuestros horarios? ¡Contadnos vuestras anécdotas!

¡Nos vemos en septiembre!